Correligionarias, Correligionarios y simpatizantes, estamos
reunidos esta noche entorno al aniversario número 98 de nuestra Juventud
Radical de Chile y hoy para mí estas palabras tienen un especial y
emotivo significado, es el último aniversario que realizo como
Presidente Regional Metropolitano de la Juventud.
El video que acabamos
de ver, quiso reflejar plenamente el espíritu de nuestra región y de lo que ha
sido nuestra gestión, el espíritu americanista y republicano, aquel que
compartieron Bolívar y O’Higgins, aquel que comparte la República Bolivariana
de Venezuela, aquel que compartimos tantos hoy en este lugar.
Hace poco en el comité Interamericano celebrado en Colombia,
nos reafirmamos como bloque político juvenil el deber de luchar por la paz y la
unión entre pueblos. Estos saludos fraternos, no hacen más que
reafirmar aquel camino que nos hemos planteado como juventud, hoy, que vemos
como la derecha fascista vuelve a ganar espacios en nuestro continente. Esto
nos convoca a la obligación moral de entregar
una Latinoamérica unida ,y fuerte, donde las juventudes políticas de izquierda
avancemos para encontrar esa justicia social tan anhelada y que tantas veces se
nos ha negado como pueblo.
El año 2012 llegué a ocupar este cargo lleno
de sueños e ideas, comencé este largo camino cuando en la región éramos pocos,
éramos más ideas que personas, más palabras que acción. Habiéndome formado en
la Asamblea de La Cisterna supe que debíamos hacer un cambio, un cambio
Radical. Hoy podemos decir con orgullo que esta es una
región completamente distinta
Miren a su alrededor… miren cuantos jóvenes hay aquí, miren
a cuantos no conocen y eso no es malo, es señal que hemos crecido y lo
¡seguiremos haciendo!
Pero este trabajo no ha sido sólo de una persona,
como olvidar quien ha sido un gran
correligionario, militante desde los 14 años, Thomas Córdova con quien
iniciamos esta aventura del regional el año 2012 y hoy es uno de los más
destacados miembros del CEN, o quien ha realizado la labor en la secretaria del
regional desde el 2014, correligionario Juan Ignacio Cornejo, con trabajo en la
comuna, en la calle,que es precisamente donde no estamos
actualmente los Radicales, donde faltamos, donde la gente nos necesita más que
nunca, volver a la Calle es la tarea obligatoria que tenemos pendiente
¡Volvamos a recuperar el amor por participar de la organización vecinal, los
clubes sociales, culturales y deportivos de barrio
Las organizaciones de base nos necesitan y nosotros a ellas.
Chile necesita el Radicalismo, y nuestra tarea hoy es que cada
ciudadano sepa que el radicalismo sigue siendo una fuerza de cambio y justicia para nuestra
sociedad, que nuestra Juventud sigue siendo la Juventud que cree en
el Socialismo y que cada uno sepa que llegaremos a él!
Los jóvenes que acabarán con la hegemonía capitalista, los
jóvenes que cambiarán este país indiferente, sumido en el consumo, seremos
nosotros… los jóvenes RADICALES!
Hoy, es mi última vez en esta instancia
como presidente del consejo, incluso tengo un poco de tristeza, pero con mucha
esperanza los invito a cada uno de
ustedes a retomar la difícil tarea de ser un verdadero radical, revalidando día
a día nuestro compromiso hacia los valores Humanistas, Laicos y Socialistas PERO
EN EL LUGAR DONDE REALMENTE IMPORTA: EN
LA CALLE y la tarea correligionarios no es fácil pues la dictadura nos legó una
sociedad desmovilizada, egoísta, capitalista y cegada por los dogmas del libre
mercado, donde el respeto por el ser humano está en el último lugar de las
prioridades de la clase burguesa y explotadora.
Debemos tomar conciencia que el camino no es
seguir personas, intereses mezquinos o egos trasnochados que sólo nos dañan.
Después de 150 años debemos entender que las divisiones ya le han hecho
demasiado mal al Radicalismo. No volvamos nosotros a repetir los errores del
pasado.
Hoy estamos colocados en un tránsito histórico, como
dijera el Compañero Presidente Salvador Allende, donde tenemos la gran
oportunidad de poder cambiar la historia de nuestro país, de volver a politizar
nuestras poblaciones, a nuestros sindicatos, volver a recuperar lo público, reconstruir
al Estado, hacerlo un eje central de la
redistribución y equidad de oportunidades como en nuestros gobiernos, donde
habíamos encaminado a Chile por la senda de la Justicia Social y el Laicismo;
luchando contra la opresión, el autoritarismo y los dogmas… Un Chile con educación
pública, laica, gratuita, universal y con una profunda conciencia social.
En torno a este recuerdo, y esta posibilidad,
posibilidad real que tenemos hoy de cambiar la Constitución, debemos meter los
pies al barro… Para salir a la calle no necesitamos más que nuestra voluntad y
fuerza, con la fuerza de las ideas,
podremos volver con la frente en alto a las poblaciones, a los liceos y a las
universidades.
Este es un llamado para todos aquellos que saben dónde está
el trabajo de un partido, para aquellos que saben que el teclado es sólo una
ayuda y que el verdadero trabajo se gana caminando, recorriendo las calles
junto al pueblo, ahí volveremos a tener a un correligionario o a una
Correligionaria Presidenta de la República, para un Chile con verdadera
justicia, HUMANISTA, LAICO Y SOCIALISTA DEMOCRÁTICO.
Porque vengan otros 150 años más, que viva el gran partido
de los ideales, porque vengan 98 años más de historia, que viva la Juventud
Radical de Chile!
(Último discurso en aniversario de la Juventud Radical de Chile, como presidente Regional Metropolitano)